sábado, 21 de enero de 2006

Celulosa o personas

Querida Mara:

Vivimos en una constante paradoja que me cuesta explicarte con sólo dos meses de existencia. Yo, con 30 años, soy incapaz de entenderla. Mientras que en esta porción de universo nos empeñamos en construir muros de cerrazón y miopía, seguimos abriendo fronteras espaciales fuera de la atmósfera.

El jueves, la sonda ‘New Horizons’ partía rumbo a Plutón en la primera misión a tan desconocido planeta descubierto en 1930. Parece mentira, pensaba que llevaba ahí toda la vida. Tardará diez años en llegar, calculan. Minuto arriba, minuto abajo. No parece mucho si pensamos en lo que tarda un regional de RENFE desde Valladolid hasta Soria.

Pasada esa década, Mara, tú estarás atisbando el horizonte de la adolescencia. Para entonces, muchos de los sucedidos que esta semana han provocado rasgamientos de vestiduras seguramente parecerán tonterías anacrónicas. ¿Habrán llegado los llamados 'papeles de Salamanca' a Cataluña en ese tiempo? Quién sabe, quizá sigan de transbordo en la Audiencia Nacional.
Lanzarote aprovecha la coyuntura para convertirse en Agustina de Aragón con bigote de superintendente de la T.I.A.
Éste es uno de esos fenómenos extraños que te comentaba. Un simple trámite administrativo es convertido por esos seres de los que ya te advertí el día de tu nacimiento, los políticos, en arma arrojadiza de odios y demagogias. Unos y otros alzan la bandera del nacionalismo casposo para vendarnos los ojos. Así nos ocultan la realidad y corren un estúpido velo sobre el precio de la vivienda, las listas de espera en los quirófanos, el amenazante paro o la escasa voluntad de integrar a los inmigrantes que rejuvenecen este vetusto país.

Demagogia nacionalista

Poco importa lo realmente importante si tenemos unos papelajos, que nadie se ha molestado en mirar en años, con los que marear al personal. Las verdades objetivables en las que deberían hablar los científicos de la Historia se ocultan ante la verborrea barata. Carod ensucia la memoria histórica y la aprovecha para hacer una muesca en su culata de aspirante a cacique provinciano.

Los dos grandes cambian de postura según les convenga y donde dije digo, digo Diego. Caldera mira de reojo la hemeroteca para que nadie recuerde sus palabras de opositor cuando rechazaba la devolución de papeles y Acebes olvida las declaraciones de Aguirre a favor del retorno cuando las tornas eran otras. Por su parte, Lanzarote, ensimismado en su papel de caudillo numantino, aprovecha la coyuntura para convertirse en Agustina de Aragón con bigote de superintendente de la T.I.A.
Luchemos por una Casa de Lys cuyo Ayuntamiento machacado o porque en Soria haya un triste kilómetro de autovía
No voy a entrar ahora a argumentar, a favor o en contra, sobre la legitimidad moral o jurídica de la medida adoptada para trasladar los legajos a Barcelona. No tenemos tiempo. Y menos cuando vivimos en la hora de las microfilmaciones o la documentación de la Guerra Civil anda repartida por media España. Sobre tanto nerviosismo por la pérdida de la unidad archivística, ¿por qué no se llevan a Salamanca los archivos de la Fundación Franco? Es una opción, ya que se les subvenciona ampliamente.

Esta polémica, que parece parida por Berlanga y Azcona a la limón, ha despertado pesadillas que parecían olvidadas cuando conmemoramos el 60º aniversario de la barbarie del 36. Tanto tiempo después, en un debate decimonónico, aún nos preguntamos qué es España y derechas e izquierdas tensan cuerdas sin prever consecuencias…

Con la pretendida defensa del archivo con sede en Salamanca, que no de titularidad salmantina, se ha pretextado una absurda defensa de lo nuestro. Está bien querer a esta tierra hasta que nos duela, pero luchemos por nuestro verdadero patrimonio. Por una Casa de Lys, joya del Art Decó, cuyo Ayuntamiento ha machacado o porque en Soria haya un triste kilómetro de autovía.

Mara, desde tu inocencia de lactante, ¿qué prefieres: que se lleven unos papeles que estaban accidentalmente en esta Comunidad o que nuestros jóvenes se vean obligados a emigrar porque piensan que aquí no hay futuro? Yo, al menos, prefiero las personas a la celulosa.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ni salamanca ni los castellanos-leoneses necesitaban ser humillados de esa forma. gracias polanco por hacer oir una sola voz, esto es imparcialidad..GRACIAS CADENA COPE

Anónimo dijo...

Defender la unidad del archivo es algo que para historiadores e investigadores como yo va mas allá de la polémica entre unos partidos y otros, pero el alcalde de Salamanca está en su legítimo derecho

Anónimo dijo...

Porqué no se olvidan de los documentos y piden más empresas para esta olvidada Castilla y León?